La Municipalidad de Arequipa ha tenido que depender de la Municipalidad Distrital de Yanahuara para intentar resolver la grave problemática de residuos sólidos que afecta a su jurisdicción. Esta situación evidencia la falta de capacidad y planificación de las autoridades locales, que no han podido garantizar un servicio básico como el recojo de basura.
El préstamo de un camion compactador de 8 toneladas por parte de Yanahuara apenas mitiga el caos generado por la paralización de los obreros de limpieza pública, quienes llevan días sin operar debido a conflictos internos. Esta medida temporal no soluciona el problema de fondo: la incapacidad de la Municipalidad de Arequipa para gestionar sus propios servicios.
Lo más preocupante es que esta cooperación forzada se da en el marco de una convocatoria de emergencia, lo que demuestra que no existía un plan de contingencia para situaciones críticas. La población sigue sufriendo las consecuencias de esta mala administración, con calles llenas de basura y un evidente riesgo sanitario.
