La Municipalidad de Arequipa ha decidido imponer medidas coercitivas contra los propietarios de vehículos, restringiendo drásticamente las zonas de estacionamiento en pleno centro de la ciudad.
En una acción considerada autoritaria por algunos conductores, la subgerencia de Transporte Interurbano y Especial, junto con inspectores, bloquearon con conos la calle Ugarte, limitando sin previo aviso espacios que antes eran utilizados por los automovilistas.
Estas medidas represivas, que ya se aplicaron antes en calles como Rivero y San José, serán extendidas a más vías del cercado, generando preocupación entre los ciudadanos que ven cada vez más reducidas sus opciones para estacionar.
Peor aún, la comuna amenaza con implementar un proceso sancionador que incluirá multas y la remoción de vehículos mediante grúas, los cuales serán llevados al depósito municipal, causando gastos y molestias a los afectados.
Esta campaña restrictiva, disfrazada de «preventiva», ha sido criticada por muchos conductores que la consideran excesiva y poco conciliadora, argumentando que la municipalidad debería crear más espacios de estacionamiento en lugar de limitar los existentes.
