
Polonia ha implementado restricciones severas al tráfico aéreo en su región oriental tras derribar al menos 19 drones rusos que incursionaron en su espacio aéreo durante la noche del 10 de septiembre de 2025. La medida, que estará vigente hasta el 9 de diciembre, afecta principalmente a la frontera con Bielorrusia y Ucrania.
El primer ministro, Donald Tusk, confirmó las violaciones del espacio aéreo, que aunque no dejaron heridos, causaron daños materiales en una vivienda y un vehículo. Este incidente marca la primera vez que un país miembro de la OTAN derriba artefactos rusos en su territorio desde el inicio de la invasión a Ucrania.
En respuesta, el gobierno polaco solicitó una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU y activó el Artículo 4 del tratado de la OTAN, mecanismo de consulta ante amenazas a la seguridad territorial. La Alianza Atlántica modificó su agenda para abordar la grave provocación.
Letonia, en un movimiento coordinado, también anunció el cierre de su espacio aéreo fronterizo con Rusia y Bielorrusia por al menos una semana, intensificando el clima de tensión en la región.